Los sonidos se pueden clasificar por su respuesta subjetiva, así los más usuales, como por ejemplo la palabra, pueden considerarse como sonidos, siempre que los niveles de presión sonora que producen no sean excesivos, ya que en este caso se tendrían que denominar ruidos, entendiendo por tal, todo sonido no deseado. Ciertos sonidos agradables se clasifican generalmente como musicales, aunque pueden convertirse en ruido. Por lo tanto, el Ruido es el resultado de una respuesta 100% subjetiva, ya que depende de la molestia que produce en una persona determinada.
Ruido es, por tanto, todo sonido no deseado.
La diferencia entre sonido agradable y molesto va a depender de dos cosas; el nivel de presión sonora y la respuesta subjetiva.
Un ruido de elevado nivel de intensidad (mayor a 90 phones) produce pérdida auditiva, dolor y debería eliminarse.
Hay muchos tipos de ruido: ruido de fondo, ruido aleatorio, ruido blanco, ruido contínuo constante, ruido constante pero intermitente, ruido fluctuante, impulsivo y ruido rosa.
Los ruidos graves tienen un efecto muy enmascarante, son muy molestos.
Los ruidos agudos son también muy indeseables, pero en otro sentido, se pierde calidad en la palabra.
Debido a los efectos fisiológicos y psicológicos, el ruido es una importante fuente de molestias en las sociedades industriales (aceleración del ritmo cardíaco, modificación del ritmo respiratorio, variaciones de la presión arterial, etc.). El ruido crea una perturbación cuyas consecuencias pueden ser muy variadas.